futbol-Twitter-perdida-Johan-Cruyff_901420582_100275856_667x375Espero que allí donde estés disculpes mi atrevimiento por escribir estas líneas. Lo cierto es que durante los últimos días no he dejado de leer los artículos de prensa que hablan tanto de ti…

Me cuesta describir las sensaciones internas que me embargan ante tantas opiniones, todas ellas dominadas por la tristeza del recuerdo de alguien que nos abandona. El Barça es el Club de mi vida, mis compañeros y amigos lo saben. Me hace disfrutar a la vez de sufrir. Pocas son las conversaciones en mi vida en las que las emociones afloran tanto como cuando de fútbol se trata.

No soy un entendido de la materia y disfruto ante el televisor viendo los partidos de mi equipo. Sin embargo hoy tengo sensaciones diferentes, es como si algo me falta y me produce una profunda tristeza. En ese momento recuerdo un momento de mi vida en que nos saludaste tal como eras tú

No recuerdo el año, sin embargo me acuerdo perfectamente del lugar y el momento. Real Club de Polo de Barcelona, allá por el año 2.000-2.002, campeonato del mundo de Hípica… Un grupo de compañeros, que representábamos a uno de los patrocinadores, paseábamos por la zona VIP (qué mal suena…) y de repente un compañero nos dice que Cruyff viene caminando en nuestra dirección. Extrovertido mi compañero, no tiene otra ocurrencia que atreverse a ir y saludarte… y TÚ… nos saludaste a todos cual si formáramos parte de tu vida diaria. No me lo podía creer, Johan Cruyff, el mismísimo JOHAN CRUYFF me había estrechado la mano.

Han pasado ya los años y aquella emoción del momento se ha despertado hoy después de leer y leer artículos sobre ti.

Te ruego, de nuevo, que me disculpes por pronunciar tu nombre o tal vez, por recordar aquel momento como si fuera hoy, sin embargo me pregunto cuantas personas de “renombre” de hoy, hubieran actuado como actuaste TÚ aquel día…

Lejos de mi sentimiento “culé”, hoy tenía la necesidad de mirar mi mano derecha y recordar a aquella persona que nos ha abandonado y que tanto me impresionó aquel día en el Real Club de Polo de Barcelona, donde mis obligaciones profesionales han quedado en el olvido y sin embargo, hoy mi mano recobra tu tacto y el recuerdo.

Descansa en paz y mi más sentido pésame a todas la personas que te van a echar de menos cada día de sus vidas.

#GraciasJohan